Declaratoria de la UNESCO

Pirekua, patrimonio universal

La representación mexicana ante Unesco durante la declaratoria, en Nairobi.

Este martes 16 de noviembre de 2010, México logró que la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), reconociera sus tres candidaturas a la lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad: la cocina tradicional (respaldada por un estudio de caso procedente de Michoacán), la pirekua (que es una de los géneros musicales de la etnia purépecha, también en Michoacán) y la fiesta de los Parachicos, oriunda de Chiapa de Corzo, Chiapas.
Las nominaciones fueron incorporadas durante la V Reunión del Comité Intergubernamental para la Salvaguarda del Patrimonio Intangible de la Humanidad de la Unesco, celebrada en la ciudad de Nairobi, en Kenya, África.
Este es, por decirlo así, el segundo gran hit que anota Michoacán ante el organismo en materia de cultura intangible en menos de una década. Apenas en 2003 la Unesco aceptó añadir a su lista la tradición de Día de Muertos en México, cuyo principal expediente fue también michoacano.
La lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad en la que a partir de hoy figuran las pirekuas fue constituida por la Unesco en su Convención de 2003 y ha sido firmada hasta ahora por 132 países. Su objetivo es proteger culturas y tradiciones populares, reconociéndoles un valor idéntico al de la cultura “tangible” (sitios y monumentos). En total, con los casos de la pirekua y de la gastronomía tradicional mexicana, son 178 las prácticas culturales o tradicionales que han sido inscritas como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad.

El secretario de Turismo de Michoacán, Genovevo Figueroa Zamudio, y el gobernador Leonel Godoy, al dar la noticia en Morelia.

La palabra Pirekua, que habitualmente se traduce al español como “canto” o “canción”, sirve para representar a uno de los tres géneros musicales más característicos de la etnia purépecha de Michoacán. Los otros dos, naturalmente, son los sones y los abajeños.
Una diferencia entre la pirekua y los sones y abajeños consiste en que los segundos son, ante todo, piezas bailables. La pirekua, en cambio, es para ser escuchada.
Aquel que interpreta pirekuas recibe el nombre de pireri y estas canciones pueden ser interpretadas por formaciones muy disímbolas. Se dice que la formación tradicional es la de cuarteto (guitarras, violín y contrabajo), pero la verdad es que las pirekuas pueden ser igualmente interpretadas por solistas, duetos, tríos, orquestas e incluso por grupos corales a capela. Sea en una u otra formación, la pirekua es un vehículo de expresión de los más diversos temas que van de lo amoroso a los de contenido social, pasando por el remordimiento, la alegría, la celebración, la pena e incluso una picarezca muy sui generis.

En su libro Mitote, Fandango y Mariachero, el investigador Álvaro Ochoa Serrano, del Colegio de Michoacán, señala que el origen de las primeras bandas y orquestas purépechas se remonta al año de 1540, con la llegada a tierras michoacanas de los primeros misioneros agustinos, procedentes de Guerrero. La orden emprendió sus labores evangelizadoras a través de la música en comunidades como Tiripetío, Tacámbaro, Zirosto, San Juan Parangaricutiro, Zacán, San Felipe de los Herreros, San Francisco Corupo y Tingambato, donde establecieron conventos e introdujeron instrumentos musicales europeos como vehículos para convertir a los indígenas a la fe cristiana.
Sin embargo, la Pirekua tal como hoy la conocemos surge a mediados del siglo XIX, parcialmente inspirada en los valses propios de la época, combinando esa influencia con la sensibilidad y las estructuras propias de la etnia purépecha en Michoacán.

Dos de los representantes de la delegación Mexicana, en Kenya.

Al dar a conocer la noticia, el gobierno de Michoacán emitió hoy un comunicado que documenta la conferencia de prensa (a la que no alcancé a llegar en persona) donde el gobernador Leonel Godoy, acompañado del secretario de Turismo, Genovevo Figueroa Zamudio, dieron a conocer el nombramiento realizado por la Unesco.
El boletín señala que, durante su intervención, el gobernador dijo que este nombramiento “nos enorgullece como michoacanos y como mexicanos, al ser considerados materiales intangibles e inmateriales de la humanidad. Los nombramientos vienen a fortalecer y ratificar el buen año que se ha tenido en materia turística en Michoacán, al tener un repunte importante en relación al año 2009”.
“Los resultados logrados demuestran que se vienen haciendo bien las cosas en el tema turístico en el estado, aprovechando de gran forma los recursos con los que se cuenta, contribuyendo de esa forma a que el sector sea pieza fundamental en el desarrollo económico del país y del estado, ya que se generan empleos, se conservan tradiciones culturales traducidas en bailables, música, comida, lo que contribuye a seguir siendo un referente en lo que a turismo cultural se refiere”.
Por su parte, Genovevo Figueroa Zamudio, secretario de Turismo, indicó que “la inscripción no se dio como una gracia inmerecida, se debe más bien a una ardua y paciente labor que llevó a la elaboración de un expediente que tuvo que cumplir con rigurosos criterios fijados por ese organismo internacional, mismo que requirió de manera perentoria se partiera de un caso específico para evaluar la factibilidad del plan de salvaguardia, razón por la cual se tomó como punto de partida el paradigma de Michoacán, entidad en la que se ha desarrollado el programa de Cocineras Tradicionales con excelentes resultados”.
“Entre los méritos que fueron tomados en cuenta para considerar la cocina tradicional de los mexicanos como una manifestación cultural viva, representativa de la humanidad están su antigüedad, su continuidad histórica, así como la originalidad de sus productos, técnicas y procedimientos. Y es que, en efecto, en su raíz más ancestral la comida que hoy se sigue comiendo en el país en lo esencial no difiere de la que se comía en el pasado remoto, debido a que la base constituida por el maíz, el frijol y el chile sigue teniendo total vigencia”.
Asimismo indicó que La Pirekua, el canto tradicional Purépecha fue declarado hoy Patrimonio Cultural Intangible de la Humanidad, durante la Sesión de la UNESCO donde se analizaron 67 expedientes de 32 países, y los casos michoacanos se aprobaron con número de folio 00398, en el caso de la Pirekua y 00400 en el caso de la Cocina Tradicional Mexicana, para formar parte de la Lista Oficial de Patrimonio Cultural.
Genovevo Figueroa mencionó que al tiempo de su registro en la lista del Patrimonio Mundial, los dos casos michoacanos son reconocidos como parte de la diversidad cultural del Mundo y la delegación mexicana se comprometió a trabajar intensamente para rescatar, salvarguadar y promover estas ricas expresiones culturales como la música, unida a la lengua purépecha y la gastronomía.

Entre otras manifestaciones culturales incorporadas hoy por la Unesco a su lista patrimonial figuran la cocina mediterránea (candidatura compartida entre España, Grecia, Italia y Marruecos), así como el género dancístico del flamenco.

EN VIDEO / Una pirekua


ENLACES
Hay un buen artículo alusivo al tema de la pirekua en el blog Macuala “Música Tradicional Mexicana”; el enlace, aquí

Un post más académico (no en balde figura en la página institucional de la CDI), pero emprendido con buen conocimiento real, directo, y que incluye varias pistas reproducibles y descargables, se encuentra en este enlace.